A pesar de que a veces sea evidente que un paciente tenga la necesidad de llevar audífonos y un especialista se lo haya recomendado, éstos pueden mostrarse reacios al principio a utilizarlos porque cuesta reconocer que necesitan audífonos para entender a su entorno y prefieren no admitir su situación.
La familia es muy importante a la hora de animarlos a dar este paso y que puedan darse la oportunidad de comprobar como mejoran la calidad de vida en muchos aspectos. Hay muchos motivos contrastados con estudios sociales y psicológicos que pueden ayudarnos a decidir adaptarnos unas ayudas auditivas:
SENTIRSE MÁS SEGURO E INDEPENDIENTE
Una persona que escucha y entiende bien es un individuo independiente que puede valerse
por sí mismo. Cuando tenemos una pérdida auditiva socialmente nos aislamos debido a la falta
de entendimiento . Gracias a los audífonos esa barrera se elimina y la persona puede volver a
sentirse segura y a integrarse socialmente en actividades fundamentales en la vida diaria que
había dejado de hacer.
MEJORAR LAS RELACIONES FAMILIARES Y SOCIALES
Al comprender todo de manera más clara mejoramos la integración en todos los ámbitos familiares y sociales pudiendo mantener conversaciones de manera fluída y volviendo a estar ACTIVOS. Las personas con pérdida auditiva “oyen pero no entienden” y esto les hace aislarse y dejar de hacer cosas porque suponen un sobreesfuerzo para ellos. Esa barrera hay que romperla para mejorar su calidad de vida y sus lazos familiares y sociales.
MEJORAR LA CAPACIDAD DE CONCENTRACIÓN Y LA CALIDAD DE VIDA REDUCIENDO EL AGOTAMIENTO MENTAL
Según los últimos estudios el 95% de los usuarios de audífonos quedan satisfechos con ellos puesto que mejoran considerablemente su nivel de vida al poder volver a realizar actividades del día a día que habían dejado de hacer.
Si puedes escuchar viene sin realizar grandes esfuerzos no solo mejoras la calidad de vida sino que la capacidad de concentración aumentará de forma gradual puesto que focalizas tu mente en lo verdaderamente importante sin necesidad de hacer esfuerzos adicionales en entender.Una persona que tiene que realizar esfuerzos adicionales continuos para tratar de escuchar bien, se siente más cansado al final del día, algo que lo merma física y psicológicamente.
MENOR RIESGO DE DETERIORO COGNITIVO
Aunque la pérdida auditiva está relacionada con el oído, el cerebro también es parte importante del sistema auditivo. Al dejar de percibir los sonidos este pierde una fuente de estimulación. Los audífonos evitan que el cerebro acabe olvidando estos sonidos.
FOMENTAR NUEVAS RELACIONES
Muchas personas con deficiencia auditiva solo se sienten seguras conversando con aquellos a los que conocen y dejan de abrir su círculo social por miedo al rechazo. Al tener dificultades de escucha se frenan a la hora de entablar conversaciones o crear vínculos con gente nueva. Una buena adaptación de audífonos implica recuperar la confianza perdida en sí mismos y verse capaces de tener nuevas relaciones sociales sin ningún tipo de barrera.
Por todo esto, si tú o alguna persona que conozcas se encuentra en una situación auditiva mala que se podría solucionar con facilidad con unos audífonos, pero que no quiera utilizarlos, explícale todas las ventajas que ofrecen hoy en día y la posibilidad que siempre les damos de probarlos SIN NINGÚN COMPROMISO para que puedan beneficiarse tanto a nivel social como psicológico de ellos.